dijous, 30 de gener del 2025

Las tres últimas monjas clarisas de Pedralbes abandonan el ex Real Monasterio tras 700 años de presencia ininterrumpida

Claustro del ex Real ex Monasterio de Santa María de Pedralbes, Barcelona
 

 

Las tres últimas monjas clarisas de Pedralbes abandonan el ex Real Monasterio tras 700 años de presencia ininterrumpida



Son los frutos de la renovación de la vida religiosa obrada por el Concilio Vaticano II




Agencia FARO (Barcelona).— El próximo mes de febrero —si Dios no lo remedia—, las monjas clarisas abandonarán el ex Real Monasterio de Santa María de Pedralbes y se trasladarán a Vilobí d’Onyà (comarca de La Selva, Diócesis de Gerona).

Se trata de las tres últimas monjas que quedan en el Monasterio de Pedralbes: sor Inmaculada, sor Pilar y sor Isaura, de 90, 73 y 66 años respectivamente. En 1950, eran medio centenar de religiosas.

Con su marcha, se pone fin a la presencia ininterrumpida durante 700 años de las clarisas en el histórico Monasterio, escenificando así el final de una era espiritual en Barcelona.

El Monasterio fue fundado en el año 1326 por el Rey Jaime II de Aragón y por su esposa Elisenda de Moncada. Durante sus siete siglos de historia, ha sobrevivido a varias vicisitudes, como la exclaustración de 1640 durante la Guerra de los Segadores, los sucesos de la Semana Trágica de 1909, o la Cruzada de 1936. A pesar de estos hechos históricos, la comunidad religiosa siguió viva y el Monasterio en pie.

Sin embargo, lo que no consiguieron derribar estos acontecimientos desde el exterior de la Iglesia, lo ha logrado la renovación religiosa obrada por el Concilio Vaticano II. Y como consecuencia, el hasta ahora ex Real, se convertirá también en ex Monasterio.

En efecto, la Constitución dogmática Lumen gentium, el Decreto conciliar Perfectae caritatis y el«Motu proprio» Ecclesiae Sanctae, de Pablo VI, perpetraron una renovación de la vida religiosa cuyos frutos, podridos, se han hecho evidentes en las últimas décadas, siendo la presente marcha de las clarisas de Pedralbes un episodio más de dicha renovación.

Esta renovación —en realidad, decadencia según el Cardenal Daniélou en los años 70, o derribo podemos afirmar hoy— alteró los principios y la estabilidad de la vida religiosa, transformó su fondo y vició el modo de vivir las virtudes religiosas:

Se pretendió olvidar que la vida religiosa es un género de vida conformado sobre los consejos evangélicos y, por tanto, objetivamente más excelente que la vida común, conformada solamente sobre los preceptos. En definitiva, se pretendió olvidar el carácter supererogatorio de la vida religiosa, buscando una exagerada asimilación al mundo: se dulcificó la disciplina; se relajó el deseo de una vida más espiritual, orante y austera; se transformaron (o abandonaron) los hábitos para no diferenciarlos ya de las ropas seglares; etc.

Se asignó un nuevo fin a la vida religiosa: el servicio al hombre más que el servicio a Dios. Fue la consecuencia de suponer, falsamente, que el hombre no tiene ni puede tener como fin su propia salvación, pues ello sería un error de utilitarismo teológico.

Se vició el modo de vivir las virtudes religiosas: obediencia, pobreza, castidad, temperanza... La disminución de cada una de ellas supuso simultáneamente la disminución de la vida religiosa en general.

Esta nueva doctrina sobre la vida religiosa se materializa en la liturgia: en la Misa Novus Ordo. Sin sacrificio, sin Misa—sacrificio, sin distinción clara entre el sacerdocio sacramental y el sacerdocio común de los fieles, etc.

A causa de aquella nueva doctrina vaticanosegundista, expresada en esta nueva liturgia, la vida religiosa entra en crisis y, en último término, carece de sentido.

A pesar de ello, la esperanza, sustentada en la indefectibilidad de la Iglesia y en su divina fundación por Cristo, nos anima a perseverar —con la Gracia— en el buen combate por la Fe de Cristo y contra esta decadencia o derribo actual.


Agencia FARO / Círcol Tradicionalista Ramon Parés y Vilasau (Barcelona)

 


 

dimecres, 29 de gener del 2025

29 de enero: aniversario del acto carlista en Montserrat en protesta y desagravio por la retirada del monumento al Requeté, en 2022.

 

 

29 de enero: aniversario del acto carlista en Montserrat en protesta y desagravio por la retirada del monumento al Requeté, en 2022.


El acto reunió a medio millar de carlistas




Se cumplen ya tres años. El 14 de enero de 2022, la Abadía de Montserrat retiró, sin aviso, el monumento al Requeté de Montserrat que se emplazaba ante la Cripta-Mausuleo donde reposan hasta la eternidad los cuerpos de 319 requetés del Tercio de Ntra. Sra. de Montserrat.

Al día siguiente, 15 de enero, el Círculo Tradicionalista de Barcelona Ramón Parés, de la Comunión Tradicionalista, emitió un contundente comunicado. En él, se recuerda y se denuncia que la retirada del monumento a los mártires responde a «un odio antiguo, profundo; a una Revolución recurrente que se remonta hasta el Non serviam primigenio. Es este odio antiguo de los sin Dios revolucionarios, unido con una mal disimulada sed de venganza, lo que resurge hoy día bajo la máscara de la “memoria democrática”».

A ese comunicado, siguió la realización del histórico acto de protesta y desagravio, realizado el sábado 29 de enero de 2022, que reunió a medio millar de carlistas, y que fue organizado por el Círculo Tradicionalista Ramon Parés y Vilasau, de Barcelona, de la Comunión Tradicionalista.

En este acto histórico, uno de los capellanes de nuestro Círculo, Emmanuel Pujol, rezó el Vía Crucis en el lugar donde se emplazaba el monumento, ante la Cripta-Mausoleo de los requetés. Desde allí, se procesionó en fila de a dos hasta la explanada de la entrada de la Abadía, cantando y rezando Perdona a tu pueblo, Señor, y las Letanías de los Santos en latín. En la explanada, nuestra margarita Helena Escolano, impulsora del Club de lectura carlista de Barcelona, leyó un contundente pero justo manifiesto: «Con el corazón compungido, nos hemos reunido en esta plaza por cuatro motivos: * Para protestar contra la vergonzosa retirada, conocida el pasado 14 de enero de este año, del Monumento del Requeté yacente que encabezaba el Mausoleo del Tercio de Montserrat. * Para desagraviar por esta profanación. * Para honrar a los Requetés del Tercio de Montserrat. * Y para exigir la devolución del monumento a su lugar original (...)».

Al término, su lectora Helena Escolano y el jefe del Círculo catalán, José Luis Escobedo, fueron recibidos por el Prior de la Abadía, el Padre Bernat Juliol, con quien mantuvieron una intensa entrevista de una hora larga de duración.





Los siguiente videos pueden visualizarse en YouTube:

* Video-reportaje completo del acto de protesta.

* Video de avance.

* Mensaje de S.A.R. Don Sixto de Borbón.

* Introducción al rezo del Vía Crucis, por el Rvdo. P. D. Emmanuel Pujol.

* Lectura del Manifiesto en la explanada de Montserrat, por parte de nuestra margarita Helena Escolano, directora del Club de lectura carlista de Barcelona.

* Canto del Oriamendi, al concluir el acto.






Igualmente, pueden leer y consultar:

* La crónica del acto, publicada el mismo día en el diario La Esperanza.

* Un reportaje fotográfico publicado en el cuaderno de bitácora del Círculo.

* El mensaje de agradecimiento del Círculo carlista catalán, publicado pocos días después.






Aquel día histórico, nuestros gritos resonaron en los peñascos de Montserrat:

 

¡Viva Cristo Rey! 

 
¡Viva la España Católica!

 
¡Viva Cataluña española! 

 
¡Loor y gloria a los mártires!



Círcol Tradicionalista Ramon Parés y Vilasau (Barcelona).



diumenge, 26 de gener del 2025

26 de gener: aniversari de l'alliberament de Barcelona, en 1939, del terror rojo-separatista

Los requetés tomaron la montaña del Tibidabo y descendieron por Sarriá.
 

 

26 de gener: aniversari de l'alliberament de Barcelona, en 1939, del terror rojo-separatista



Els requetès van prendre la muntanya del Tibidabo i van descendir per Sarrià. El Diari de guerra del beat Tarrés va acabar aquest dia.




El 26 de gener és l'aniversari de l'alliberament de Barcelona, en 1939, del terror rojo-separatista.

Els requetès van prendre la muntanya del Tibidabo i van descendir per Sarrià, mentre el general Yagüe i el seu exèrcit del Marroc prenien Montjuïch i entraven per l'Avinguda Diagonal.

El beat Pere Tarrés i Claret, metge i prevere, va escriure en català un diari personal durant la Croada (El Meu diari de guerra 1938-1939), traduït posteriorment al castellà.

Va acabar el seu diari precisament aquest dia, 26 de gener de 1939, amb aquestes paraules, entre d’altres:

«Quan tot semblava perdut. Tu has ressorgit ple de glòria. Senyor, és la teva glòria l'única cosa que m'interessa, l'única cosa per la qual batega el meu cor! Déu meu, Déu meu, gràcies per haver-me permès presenciar tant de goig, l'alegria d'un poble que ressuscita! Déu meu, Déu meu! Laudate Dominum!

(...)

»Visca Crist Rei! Visca Espanya cristiana! Visca Catalunya espanyola!

»I poso fi al meu Diari de guerra».

—Pere Tarrés.


El periòdic La Esperanza ja va publicar fa uns anys el text íntegre del Diari d'aquesta jornada, que pot llegir-se aquí.

Igualment, pot consultar-se també un documental cinematogràfic històric en aquest enllaç.

 

Círcol Tradicionalista Ramon Parés y Vilasau (Barcelona)


«El Meu diari de guerra 1938-1939», del beato Pere Tarres, sacerdote y médico, termina ese día triunfante.


***


 

(En castellano)

26 de enero: aniversario de la liberación de Barcelona, en 1939, de terror rojo-separatista



Los requetés tomaron la montaña del Tibidabo y descendieron por Sarriá. El Diario de guerra del beato Tarrés terminó ese día.




El 26 de enero es el aniversario de la liberación de Barcelona, en 1939, del terror rojo-separatista.

Los requetés tomaron la montaña del Tibidabo y descendieron por Sarriá, mientras el general Yagüe y su ejército de Marruecos tomaban Montjuich y entraban por la Avenida Diagonal.

El beato Pere Tarrés y Claret, médico y presbítero, escribió en catalán un diario personal durante la Cruzada (El Meu diari de guerra 1938-1939), traducido posteriormente al castellano.

Terminó dicho diario precisamente ese día, 26 de enero de 1939, con estas palabras, entre otras:

«Cuando todo parecía hundido. Tú has resurgido lleno de gloria. ¡Señor, es tu gloria lo único que me interesa, la única cosa por la cual late mi corazón! ¡Dios mío, Dios mío, gracias por haberme permitido presenciar tanto gozo, la alegría de un pueblo que resucita! ¡Dios mío, Dios mío! ¡Laudate Dominum!

(...)

»¡Viva Cristo Rey! ¡Viva España cristiana! ¡Viva Cataluña española!

»Y pongo fin a mi Diario de guerra».

—Pere Tarrés.


El periódico La Esperanza ya publicó hace unos años el texto íntegro del Diario de esa jornada, que puede leerse aquí.

Igualmente, puede consultarse también un documental cinematográfico histórico en este enlace.


Círcol Tradicionalista Ramon Parés y Vilasau (Barcelona)

 

 

El beato Pere Tarrés i Claret (Manresa, 1905 - Barcelona, 1950), sacerdote y médico

 


divendres, 24 de gener del 2025

El Banco de Sabadell devuelve su domicilio social a Cataluña, tras siete años en Alicante por el «procés» secesionista

Centro corporativo del Banco de Sabadell, en Sant Cugat del Vallés
 

El Banco de Sabadell devuelve su domicilio social a Cataluña, tras siete años en Alicante por el «procés» secesionista


La decisión podría truncar la OPA hostil del BBVA, al granjearse el Sabadell el apoyo político de la Generalidad socialista «post-procés».


 

Las empresas catalanas que trasladaron su domicilio social fuera de Cataluña durante los años calientes del «procés» secesionista (2012—2022), están volviendo poco a poco al Principado.

En diciembre pasado, Agencia FARO informó del retorno de la cementera Molins a su domicilio histórico en Sant Vicenç dels Horts.

Ahora, es el Banco de Sabadell quien ha decidido, en la sesión extraordinaria de su Consejo de Administración de este miércoles 22 de enero de 2025, trasladar de nuevo su domicilio social a su anterior ubicación, en la localidad de Sabadell, en la Plaça de Sant Roc número 20. Sin embargo, su centro operativo se ubicará en la vecina localidad vallesana de Sant Cugat del Vallés.

Hace siete años, el 5 de octubre de 2017 —cuatro días después del «referéndum» secesionista—, el Consejo de Administración del Banco trasladó su domicilio social a Alicante (donde se ubicaba la extinta Caja de Ahorros del Mediterráneo, adquirida en 2011 por el Sabadell al precio simbólico de un euro). En 2017, el Sabadell justificó su traslado a Alicante por «razones puramente técnicas y no políticas» y aseguró que la entidad se vio obligada a ello para recuperar los saldos que había perdido por el «procés».

Ahora, la entidad considera que el momento es apropiado para volver, pues «ya no se dan las circunstancias que motivaron su traslado» hace más de siete años.

Pero, en el caso del Banco de Sabadell, se agregan otros motivos específicos: la OPA hostil del BBVA lanzada en mayo pasado contra el Sabadell. Esta vuelta a Cataluña puede complicar esta OPA: así, con este traslado del domicilio social, el Banco de Sabadell se estaría granjeado el apoyo político de la Generalidad post-procesista para truncar la OPA del BBVA. Para Josep Oliu, presidente del Sabadell, el BBVA sería un lobo más feroz que el «procés» ya extinto, y que había motivado el traslado en 2017.

Banco de Sabadell y Cementos Molins no son las únicas empresas catalanas que están regresando al Principado: otras, como Aguas de Barcelona, Laboratorios Ordesa, Red Points, etc., están siguiendo el mismo camino.

Esta «operación retorno» de las empresas al Principado es un signo del réquiem del «procés» secesionista anunciado en La Esperanza el 13 de mayo de 2024 (festividad de la Virgen de Fátima) y reiterado por Lo Mestre Titas en estas mismas páginas el 29 de junio del mismo año (festividad de San Pedro y San Pablo).

El Banco de Sabadell fue fundado en 1881 por 127 empresarios y comerciantes de la localidad vallesana para financiar la industria local y proveerla de materias primas en condiciones más favorables. Mantuvo su domicilio social en su ciudad natal durante 136 años, hasta que la trasladó a Alicante en 2017 como se ha indicado.

Agencia FARO / Círcol Tradicionalista Ramon Parés y Vilasau

dijous, 23 de gener del 2025

23 de enero, San Raimundo de Peñafort: un constructor de la Ciudad católica

Grabado de San Raimundo de Peñafort, con el día de su festividad tradicional.
 

 

23 de enero, San Raimundo de Peñafort: un constructor de la Ciudad católica



San Raimundo de Peñafort brilló en el campo del Derecho Canónico con las mismas proporciones que Santo Tomás de Aquino brilló en el campo de la Teología. Por eso se le considera patrón de los abogados y de los juristas en general.





El 23 de enero la Iglesia celebra, en su calendario tradicional, la festividad de San Raimundo de Peñafort (Penedés, 1175/1180 — Barcelona, 1275), cuyo sepulcro se puede venerar actualmente en una capilla lateral de la Catedral de Barcelona.

San Raimundo fue uno de los protagonistas de la época dorada de la Cristiandad.

Brilló en el campo del Derecho Canónico, por sus Decretales, con las mismas proporciones que Santo Tomás de Aquino brilló en el campo de la Teología, por su Summa theologiæ: su compilación jurídica fue el Derecho oficial de la Iglesia Universal durante casi 700 años, desde su promulgación por Gregorio IX en 1234 hasta la entrada en vigor del Código de Derecho Canónico de San Pío X en 1917.

Pero el barcelonés no destacó sólo por su sabiduría, sino por su santidad. Especialmente por su humildad, virtud que practicó en grado heroico. Tres veces renunció a importantes honores y dignidades, por humildad: en 1222, renunció a la canonjía catedralicia para abrazar una vida de recogimiento y perfección religiosa ingresando en la Orden de Predicadores recién fundada, y que había conocido durante su estancia de estudios en Bolonia; en 1235, rechazó el Arzobispado de Tarragona que le ofreció el Papa Gregorio IX como recompensa por su compilación jurídica; y en 1240, dimitió del generalato de la Orden de Predicadores, para retirarse al convento de Santa Catalina de Barcelona y llevar una vida de recogimiento, oración, estudio y mortificación. Además, tuvo la gracia de que se le apareciera la Santísima Virgen, en su advocación de la Merced, la madrugada del 1 al 2 de agosto de 1218, aparición que también recibieron simultáneamente San Pedro Nolasco y el Rey Jaime I, y que dio origen a la constitución de la Orden de la Merced para la redención de los cautivos.

Por su sabiduría y santidad a la par, se vio constituido en prudente confesor y sabio consejero de Papas (Gregorio IX) y de Reyes (Jaime I de Aragón). 

 

Actual sepulcro de San Raimundo de Peñafort, en una capilla lateral de la Catedral de Barcelona.

 


San Raimundo era de noble linaje, hijo del señor del Castillo de Peñafort, Pere Ramón, y de su esposa, Sara o Surina. Nació en el mencionado Castillo (entonces, diócesis y condado de Barcelona) hacia el año 1180 según Jaime Armengol, en 1175 según otras fuentes; en todo caso «a finales del siglo XII» como indica Josep Maurí Serra.

En aquel tiempo, fructificaba la reforma gregoriana (iniciada un siglo antes, en 1073), gracias a la cual la vida moral y religiosa de toda la Cristiandad se renovó y, con ello, el ambiente social se transformó profundamente. Los frutos visibles de aquella reforma fueron las catedrales góticas, la escolástica de Santo Tomás de Aquino, los Reyes santos, la fundación de las primeras Universidades, los gremios, la Divina Comedia de Dante, el Cantar del Mío Cid, la difusión del Derecho Justinianeo a través de la Escuela de Bolonia... y la compilación del Derecho Canónico realizada por San Raimundo de Peñafort.

En España, era el tiempo de la Reconquista: recién se habían reconquistado Tarragona en 1116, Tortosa en 1148 y Lérida en 1149, y la frontera de la Cristiandad, por el levante hispánico, se encontraba en aquel momento establecida en el río Ebro. Valencia y Mallorca aún permanecían bajo el yugo sarraceno, y se reconquistarían en vida de San Raimundo: en 1229 y en 1238, respectivamente.

También era el tiempo de la creación de la Corona de Aragón: cuando nació San Raimundo de Peñafort, reinaba desde 1162 el Rey Alfonso II de Aragón, quien fue el primer soberano en ostentar simultáneamente los títulos de Rey de Aragón y Conde Barcelona, herencia de su madre la reina Petronila de Aragón y de su padre el conde Ramón Berenguer IV de Barcelona, fruto de las capitulaciones matrimoniales de 1137.

 

Milagro de San Raimundo de Peñafort al volver desde Mallorca a Barcelona usando su capa a modo de barca y vela

 


La primera noticia documental de Raimundo es del 20 de noviembre de 1204, como scriptor de una sentencia dictada por el canónigo de Barcelona, Ramón de Rosanes. San Raimundo de Peñafort también era canónigo de la catedral Barcelona. En aquel momento, no existía aún la actual catedral gótica de Barcelona (ésta empezó a construirse en 1298 por Pedro III, décadas después de la muerte del santo), sino que San Raimundo de Peñafort conoció sólo la catedral románica, consagrada en 1058 por el obispo Guislaberto ante el conde Ramón Berenguer I el Viejo. Esta edificación románica podría ocupar el espacio central de la actual catedral gótica, y tendría tres naves con tres ábsides escalonados y pórtico de entrada; también tenía un campanario, que lindaría con el Palacio Condal (hoy, Museo Marés). Según Carreras Candi, la orientación de la catedral románica era la contraria a la actual: sus tres ábsides descansarían sobre la muralla romana que se encontraba en el actual Pla de la Seu, y su pórtico románico (trasladado al Claustro gótico, donde hoy permanece) se encontraba entonces entre los pilares donde ahora descansa el cimborrio construido a principios del siglo XX por Augusto Font.

Después de sus estudios en la escuela canonical de la catedral barcelonesa, Raimundo estudió Derecho en la Universidad de Bolonia (Italia) donde se doctoró e impartió clases entre 1217 y 1222. La Escuela jurídica de Bolonia fue determinante para la recuperación, glosa y difusión del Derecho Romano por toda la Cristiandad. Estudiantes de toda Europa acudían a Bolonia, se formaban en el Derecho clásico y, una vez concluida su formación, regresaban a sus lugares de origen, ocupaban puestos de responsabilidad y difundían así los principios jurídicos clásicos por toda la Cristiandad. Por eso, Álvaro D’Ors consideraba que la historia cultural de Occidente se asentó sobre un triángulo fundamental constituido por la compilación de Justiniano glosada y difundida desde Bolonia, por la obra de los filósofos griegos y por la Biblia.

En 1222, concluida su formación en Bolonia, San Raimundo regresó a Barcelona. Aquí, renunció a la canonjía catedralicia para abrazar una vida de recogimiento y perfección religiosa, ingresando en la Orden de Predicadores —recién fundada en 1216— y que Raimundo había conocido durante su estancia en Bolonia. Así, el Viernes Santo de 1222, 1º de abril, San Raimundo tomó el hábito dominico en el Convento de los Predicadores en Barcelona. Este convento, recién establecido en 1219 por el mismo Santo Domingo de Guzmán en persona, se ubicaba en pleno Call o barrio judío, en unas casas donadas por Pedro Gruny, en la actual calle de Santo Domingo del Call (renombrada en 2018 como calle Salomón ben Adret por el gobierno izquierdista de la ciudad).

Este primer convento dominico barcelonés pronto se quedó pequeño: así, ante la numerosa afluencia de fieles, el rezo del rosario debía realizarse en la cercana parroquia de San Jaime, la más antigua de Barcelona, fundada en tiempo inmemorial y derribada en 1823 por los liberales, para —supuestamente— abrir la actual Plaza de San Jaime.

Ante aquella necesidad de espacio, en 1223 (31 de octubre) el Rey Jaime I cedió a la Orden de Predicadores unos terrenos extramuros, en la carretera de Francia (antigua Via Francisca romana), barrio de la Bòria, en un lugar donde se erigía una pequeña ermita dedicada a Santa Catalina. Allí se levantó un gran y esbelto convento gótico consagrado en 1268, en vida de San Raimundo. Fue uno de los conventos más importantes de la Orden de Predicadores (donde vivieron insignes dominicos, como San Vicente Ferrer, entre otros) y uno de los mayores conventos de Barcelona (con dos claustros), junto al de los Franciscanos (ubicado junto al mar y que llegó a albergar hasta a mil frailes franciscanos). 

 

Superposición del antiguo Convento de Santa Catalina (consagrado en 1268 y demolido en 1837) con el Plano actual.

 

 

 

Plano del Convento de Santa Catalina de Barcelona, consagrado en 1268 con la presencia de San Raimundo. Demolido por los liberales en 1837


 

 

La época de San Raimundo fue un tiempo de construcción. No sólo se edificó en Barcelona el convento dominico de Santa Catalina (1223-1268), sino también el de los franciscanos antedicho (1236-1297), entre otros. Ambos conventos góticos fueron derribados en el siglo XIX, el mismo año, en 1837, por los liberales, (junto a la Iglesia de San Jaime, la de San Miguel, el convento de los Josefinos de la Boquería, etc.) con el fin de borrar la memoria cristiana de la ciudad. Si la época de San Raimundo fue un tiempo de construcción de la Cristiandad (construcción espiritual manifestada en lo material), el siglo XIX liberal fue un tiempo de demolición material para, con ello, demoler el orden social cristiano y el alma popular.

En 1227, San Raimundo fue nombrado consejero del cardenal Juan Halgain de Ableville, legado papal para fomentar la cruzada contra los musulmanes y consolidar la disciplina eclesiástica en los reinos de Aragón y Castilla. Fruto de ese impulso, se reconquistarían Valencia (en 1229) y Mallorca (en 1238), entre otros, como ya se ha indicado.

En 1230, viajó a Roma y fue nombrado capellán penitenciario y confesor del Papa Gregorio IX, quien encomendó a San Raimundo la compilación del Derecho Canónico. Se trata de las Decretales (Corpus Iuris Canonici) que —como ya se ha indicado— estuvieron vigentes en toda la Cristiandad durante casi 700 años: desde su promulgación en 1234 hasta la entrada en vigor del Código de Derecho Canónico de San Pío X en 1917.

Por tal motivo, a San Raimundo se le considera el patrón de los abogados, en particular, y de los juristas, en general. La importancia de San Raimundo para el Derecho Canónico es proporcional a la importancia de Santo Tomás de Aquino para la Teología, como también ya se ha indicado. Ambos santos fueron coetáneos (Santo Tomás murió en 1274 y San Raimundo en 1275), ambos fueron religiosos dominicos, y ambos se influyeron mutuamente en sus trabajos. Así, San Raimundo, siendo general de los dominicos (1238-1240), mandó a Santo Tomás de Aquino poner su obra por escrito, lo cual se materializaría en la Summa contra Gentiles (1260) y la Summa Theologicae (1265-1274).

Tras la promulgación de las Decretales de San Raimundo, en 1234, el Papa Gregorio IX le ofreció el Arzobispado de Tarragona en 1235, ofrecimiento que fue rechazado por el humilde y sabio barcelonés, quien se retiró al convento de Santa Catalina de Barcelona (en construcción, en aquel momento).

Poco le duró el descanso al santo: en 1238 (el 28 de mayo) fue elegido General de la Orden de Predicadores, o dominicos. Era el tercer General de los dominicos, tras el fundador Santo Domingo de Guzmán y su primer sucesor el beato Jordán de Sajonia, fallecido en 1237. El generalato de Raimundo fue breve pero fecundo: escribió las Constituciones de la orden, visitó los principales conventos, obtuvo bulas papales para el desarrollo de la Orden, integró la rama femenina dentro de los dominicos, animó e influyó en el trabajo de Santo Tomás de Aquino, etc.

En 1240 (el 3 de junio), renunció al generalato y regresó al Convento de Santa Catalina de Barcelona —que seguía en construcción—, donde vivió 35 años más, hasta su muerte. Durante ese tiempo, actuó como inquisidor del Reino y confesor y consejero del Rey Jaime I.

San Raimundo falleció en 1275 (el 6 de enero) —un año después que Santo Tomás de Aquino (1274) y un año antes que el Rey Jaime I (1276)—, en el Convento de Santa Catalina de Barcelona —que ya había sido consagrado en 1268—, a los 95 ó 100 años de edad. A su entierro acudieron los reyes Alfonso X de Castilla, el sabio, y Jaime I de Aragón, el conquistador.

Su cuerpo fue sepultado en una capilla lateral del Convento de Santa Catalina de Barcelona.

Fue canonizado en 1601 (el 29 de abril) por el Papa Clemente VIII. Su festividad se estableció el 23 de enero, pero la reforma vaticanosegundista la desplazó, en 1969, al 7 de enero.

 

Imagen del Convento de Santa Catalina de Barcelona, consagrado en 1268 con la presencia de San Raimundo. Demolido por los liberales en 1837

 


Con motivo de la demolición del Convento de Catalina por parte de los liberales, sus restos fueron trasladados en 1838 a la Catedral de Barcelona y, en 1879, movidos a la capilla lateral donde reposan actualmente.

Para Barcelona, San Raimundo de Peñafort es el santo que durante más largo tiempo ha permanecido en la ciudad: como estudiante, como canónigo, como fraile... Y que, durante sus casi 100 años de vida, más ha influido en la vida religiosa y social de la Barcelona de su tiempo: como consejero del Rey, como Inquisidor del Reino, como impulsor de la Reconquista, como actor fundamental en la construcción del orden social cristiano de su tiempo, tanto espiritual como material.

Por ese motivo, los carlistas barceloneses rogamos a San Raimundo de Peñafort que interceda por nosotros para que, desde los escombros del orden social que él ayudó a construir, obtengamos la gracia de permanecer fieles a los principios de Nuestro Señor y a la Santa Causa y, con la ayuda de la Virgen de Merced que a San Raimundo se le apareció, reconstruir —si Dios lo quiere— la Ciudad católica.

Josep de Losports, Circol Tradicionalista Ramon Parés y Vilasau (Barcelona)

 

Imagen del Convento de Santa Catalina de Barcelona, consagrado en 1268 con la presencia de San Raimundo. Demolido por los liberales en 1837

 



dijous, 16 de gener del 2025

Convocatòria de la sessió de febrer del curs «Mestres catalans del tradicionalisme»

 




 

Convocatòria de la sessió de febrer del curs «Mestres catalans del tradicionalisme»


S’estudiarà a Fèlix Sardà i Salvany, sacerdot i escriptor, autor d’ EL LIBERALISMO ES PECADO entre d’altres obres. L'autor serà exposat per Helena Escolano, professora.


Tindrà lloc, si a Déu plau, el dissabte 1 de febrer de 2025, a les deu del matí (10:00), a Sabadell. El punt de trobada serà la porta de l’Ajuntament de Sabadell.



La sessió de desembre del curs «Mestres catalans del tradicionalisme» tractarà sobre Fèlix Sardà i Salvany (1841-1916), sacerdot i escriptor. Conegut per ser l’autor, entre d’altres, de El liberalismo es pecado. Serà explicat per Helena Escolano, professora de filosofia i  música, i directora del Club de Lectura del Círcol Tradicionalista de Barcelona.


La sessió tindrà lloc (si a Déu plau) el dissabte 1 de febrer de 2025, a les deu del matí (10:00h.), a Sabadell. El punt de trobada serà la porta de l’Ajuntament de Sabadell.

La sessió inclourà una vista a la casa natal de Sardà y Salvany, i una visita i oració a la seva tomba.

El curs és organitzat pel Círcol Tradicionalista de Barcelona Ramon Parés y Vilasau, de la Comunió Tradicionalista. L’entrada és gratuïta. Podeu demanar més informació tot escrivint a: carlismobarcelona@gmail.com



Círcol Tradicionalista Ramon Parés y Vilasau (Barcelona)


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Convocatoria de la sesión de febrero del curso «Maestros catalanes del tradicionalismo»


Se estudiará a Fèlix Sardà y Salvany, sacerdote y escritor, autor de EL LIBERALISMO ES PECADO, entre otras obras. El autor será expuesto por Helena Escolano, profesora.
 
Tendrá lugar, Dios mediante, el sábado 1 de febrero de 2025, a las diez de la mañana (10:00), en Sabadell. El punto de encuentro será la puerta del Ayuntamiento de Sabadell.


La sesión de diciembre del curso «Maestros catalanes del tradicionalismo» tratará sobre Fèlix Sardà y Salvany (1841-1916), sacerdote y escritor. Conocido por ser el autor, entre otros, de El liberalismo es pecado. Será explicado por Helena Escolano, profesora de filosofía y música, y directora del Club de Lectura del Círculo Tradicionalista de Barcelona.


La sesión tendrá lugar (D.m.) el sábado 1 de febrero de 2025, a las diez de la mañana (10:00h.), en Sabadell. El punto de encuentro será la puerta del Ayuntamiento de Sabadell.

La sesión incluirá una vista en la casa natal de Sardà y Salvany, y una visita y oración en su tumba.

El curso está organizado por el Círcol Tradicionalista de Barcelona Ramon Parés y Vilasau, de la Comunión Tradicionalista. La entrada es gratuita. Pueden pedir más información escribiendo a: carlismobarcelona@gmail.com



Círcol Tradicionalista Ramon Parés y Vilasau (Barcelona)